Ruti Ben Ami, docente israelí, construye el puente entre la lengua árabe y la cocina marroquí. Ella sueña con una verdadera paz entre los Judíos y los Árabes en el mundo entero.
“Mi padre y mi madre son marroquíes así como mi esposo. Mis padres sólo hablaban árabe en casa, pero en darija”, declara la docente. Ruti Ben Ami llevó 40 años enseñando árabe y cuenta que sus cuatro hermanas y ella aprendieron la cocina marroquí gracias a su difunta abuela. Esta madre de tres hijos afirma saber cocinar comidas marroquí como harira, ensalada, fideo de pollo, Tajín, etc.
“Me gusta mucho Marruecos. Fui allí tres veces y me sentí como en mi país”, dijo. Según Ruti, la lengua es un puente para construir la paz y el diálogo. “Si comprendes tu lengua, puedo hablar contigo y comprenderte”, se persuadió. Sueña con una paz real entre los Judíos y los Árabes en el mundo entero, especialmente con el mundo árabe.
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