Europa necesita 50 millones de inmigrantes

"La demografía europea y su envejecimiento significan que, si queremos mantener el mismo número de personas que trabajan en la máquina económica, se necesitarán 50 millones de personas entre comillas extranjeras para equilibrar la población activa en 2050 en Europa". Ante los jóvenes de Créteil, esta era la opinión de Jean-Paul Delevoye, Alto Comisionado para las personas jubilados.

Para él, un político ahora ya no es capaz de hablar de inmigración porque todo el mundo está histérico. "Estamos en un momento muy insalubre de nuestra democracia cuando tratamos de ser chivos expiatorios: ayer era el judío, hoy es el musulmán, mañana será otro más", dijo el ex ministro de Jacques Chirac.

Estas declaraciones de Jean-Paul Delevoye, reportadas por Le Figaro, provocaron rápidamente la ira de la derecha y de la extrema derecha. En un tweet, Bruno Retailleau, jefe de los senadores de LR, dijo que era "indigno de un miembro del gobierno". Para él, esto es una "retórica escandalosa". Su pesar, dirá, es que el gobierno "prefería fomentar la inmigración antes que la natalidad".

"Entre la defensa del equilibrio de las pensiones a través de la inmigración masiva y el dudoso e inaceptable paralelismo entre "el judío de ayer y el musulmán de hoy", Jean-Paul Delevoye está perturbando una reforma de las pensiones ya mal emprendida", dijo Eric Ciotti, diputado de LR. La presidenta del Movimiento nacional, Marine Le Pen, hizo un llamamiento a los electores para que "se despierten urgentemente y tomen el control de su destino", frente a los miembros del gobierno que "tienen una hoja de ruta inmigratoria de la que no cambiarán".

En respuesta a los comentarios, Jean-Paul Delevoye lamenta observar que sus comentarios fueron "descontextualizados " y "malinterpretados por algunos".