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Marrakech: funcionarios judiciales encarcelados por robar 260 teléfonos inteligentes

Martes 23 de marzo de 2021, por Bladi.es

Tres funcionarios y otras dos personas fueron condenados por el tribunal de Marrakech a penas que van de seis meses a un año de prisión, junto con una multa de 1 000 a 40 000 dírhams. Se trata del robo de más de 260 teléfonos inteligentes, robados en el departamento de exposiciones y objetos incautados del tribunal de Benguerir.

Más de dos años después de los hechos, el asunto del robo de teléfonos inteligentes en el tribunal de Benguerir fue finalmente juzgado. Los demandados también fueron condenados a pagar la suma de 150 000 dírhams en concepto de daños y perjuicios a la parte civil, informa el diario Al Ahdath Al Maghribia. El tribunal también decidió recalificar los hechos por los que fueron procesados dos de los funcionarios. Absueltos de los primeros cargos, fueron sin embargo condenados por apropiación indebida de bienes públicos. El primero de los dos funcionarios fue condenado a seis meses de prisión y a una multa de 20 000 dírhams. En cuanto al segundo, fue condenado a un año de prisión y a una multa de 40 000 dírhams.

El tribunal también se declaró incompetente para examinar el asunto de un tercer imputado. El asunto se remonta a octubre de 2018, cuando un estudiante acudió al Juzgado de Primera Instancia de Benguerir con una orden judicial para recuperar su teléfono inteligente, un dispositivo incautado, dos años antes, en una causa judicial. Al insistir en recuperar su propiedad, el funcionario al que se dirigió se ofreció a comprarle un nuevo smartphone del mismo modelo, tras explicarle que el suyo había desaparecido.

Pero el joven se negó, diciendo que no le importaba realmente el teléfono, que costaba unos 10 000 dírhams, sino que lo más importante para él era su contenido, sus contactos. Sin saber qué hacer, el funcionario transmitió el asunto a su superior, quien a su vez informó por escrito al jefe de la secretaría judicial de la desaparición, en circunstancias misteriosas, de 260 smartphones incautados en el curso de las investigaciones judiciales y confiados a su departamento.

Una cosa llevó a la otra y la policía judicial de Marrakech consiguió rastrear varios de los teléfonos desaparecidos hasta sus nuevos propietarios, que afirmaron haberlos comprado a personas que trabajaban en el tribunal.