Portada del sitio > Marruecos > Marruecos amenazado por la sequía

Marruecos amenazado por la sequía

Jueves 5 de marzo de 2020, por Bladi.es

Las temperaturas, anormalmente altas por todo Marruecos, y la ausencia de precipitaciones son el presagio de otra sequía que podría influir en la producción agrícola, y por consiguiente, en el crecimiento económico de 2020.

Mientras Bank Al Maghrib prevé un crecimiento económico de 3,8% para el año en curso, el Centro marroquí de conjetura (CMC) predice una tasa de crecimiento de 4,6%, tras una tasa nada halagüeña de 2,9% en 2019. La insuficiencia de precipitaciones a principios de 2019, llevó a una caída significativa de la producción agrícola. Esto explica esta tasa tan bajísima. El año pasado, la producción de cereales registró una caída de 49% respecto de la estación excepcional 2017-2018. Alcanzó 5,2 millones de toneladas, muy por debajo de los 6,1 millones de toneladas previstas por el ministerio de agricultura.

La ausencia de precipitaciones en todo el país, merma las expectativas de una buena campaña agrícola. Esto acarrearía, según los expertos graves consecuencias para los pequeños productores, aumentaría el éxodo rural y retractaría el crecimiento económico, sobre todo cuando se sabe que la agricultura representa más de 15% del PIB de Marruecos y emplea 40% de la mano de obra, indica article19.ma.

En un informe, publicado por el « World Resources Institute », se dijo claramente que Marruecos forma parte de los países con grandes dificultades en materia de agua. Se le clasificó 22º entre los países con problemas de agua. El estrés hídrico de Marruecos oscila entre 1 000 y 1 700 metros cúbicos de agua dulce disponibles por persona y al año, según la Comisión económica de Naciones Unidas para África (CEA). Y la situación podría empeorarse de aquí a 2025, con previsiones de menos de 1 000 metros cúbicos de agua dulce disponibles por persona, según la misma fuente.

Es por lo que el reino ha elaborado un programa de 12 mil millones de dólares que abarca la construcción de presas, la mejora del consumo de agua, la preservación de recursos hídricos y el aumento del aprovisionamiento en las zonas rurales. El programa según Aziz Akhannouch, prevé la irrigación de 510 000 hectáreas para 160 000 agricultores.