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Todos los MRE deberán declarar sus cuentas bancarias en Marruecos antes de 2021

Domingo 21 de marzo de 2021, por Bladi.es

En virtud de los convenios fiscales internacionales de la OCDE, todos los marroquíes que residen en el extranjero están obligados a incluir sus cuentas bancarias en Marruecos en su declaración de la renta. Esta decisión entra en vigor este año 2021 e irá seguida de fuertes sanciones en caso de incumplimiento.

A través del convenio multinacional firmado en junio de 2019 para la aplicación de medidas relacionadas con los convenios fiscales de la OCDE (BEPS), Marruecos adhiere a la transferencia automática de datos bancarios a partir de septiembre de 2021. Esta medida ya está prescrita por la Ley de Finanzas de 2020 para los ejercicios fiscales que comienzan a partir del 1 de enero de 2021, comparte Eco actu, añadiendo que como parte de las previsiones de este intercambio automático de BEPS, Marruecos había puesto en marcha dos contribuciones liberatorias para permitir a los marroquíes en Marruecos ponerse al día.

Aunque Marruecos hubiera solicitado una prórroga hasta 2022 para el inicio de este intercambio, los marroquíes que residen en el extranjero y tienen activos en Marruecos deben regularizar automáticamente su situación fiscal con las autoridades fiscales de su país de residencia. En cuanto a, los residentes en los Estados Unidos de América, la operación ya está regularizada, ya que desde julio de 2014 está en vigor la Ley de Cumplimiento Fiscal de Cuentas Extranjeras (FATCA), para luchar contra la evasión fiscal que afecta a las cuentas de ciudadanos o residentes estadounidenses que tienen activos financieros fuera de los Estados Unidos. En el caso de los MRE que residen fuera de los Estados Unidos de América, están obligados a incluir sus cuentas bancarias mantenidas en Marruecos o en otro lugar en sus declaraciones de impuestos en 2021 para el año fiscal 2020.

Sin embargo, aquellos que no hayan regularizado su situación desde el inicio en septiembre de 2021, serán considerados en situación de fraude fiscal y fuertemente sancionados. Estas sanciones pueden alcanzar hasta 7 años de prisión y una multa de 3000000 de euros, o incluso el doble. La declaración también toma en cuenta las inversiones, las capitalizaciones, los activos y otros. Por ello, es importante que los marroquíes que viven en el extranjero gestionen este intercambio con el máximo rigor. Los bancos marroquíes también están obligados a informar a sus clientes que viven en el extranjero de las sanciones en las que incurren.

Pero, lo mejor sería regularizar y no contar con una posible suspensión de la OCDE. Esta es la mejor manera de protegerse contra las duras sanciones.