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No habrá vacaciones en Marruecos para los MRE

Martes 21 de julio de 2020, por Bladi.es

Muchos naturales del Magreb residentes en el extranjero desearían volver a casa, y aprovechar la vida familiar, sobre todo tras haber afrontado una cruenta pandemia. Pero para la mayoría, este proyecto está lejos de trascender debido a las restricciones y otras medidas decretadas por la covid-19.

¿Ir o quedarse? Es la pregunta que muchos naturales del Magreb, se hacen desde que se levantaron algunas medidas restrictivas, como el cierre de las fronteras y la suspensión de vuelos. Los marroquíes pueden contar con una “operación excepcional” organizada por las autoridades con el fin de permitirles, esté donde esté su lugar de residencia, volver al reino a partir del 15 de julio en avión o en barco desde Francia o Italia. Pero según un sondeo llevado a cabo por la prensa local a principios de julio, “un marroquí del extranjero sobre dos esperaba volver al país este verano, informa lamanchelibre.fr.

Varios de los que desean volver tienen dudas relacionadas con la pandemia y el miedo a ser contagiado. Y el hecho de que Rabat exija un doble test negativo de al menos 48 horas antes del embarque, es algo imposible de realizar para algunos. “¡Ningún laboratorio acepta hacerme el test, si no tengo fiebre!”, hace falta “acudir a un laboratorio privado pero ninguno de ellos acepta entregar los resultados en 48 horas”, declara enojada, una marroquí residente en Estados unidos

Esto no les pasa solo a los marroquíes. Nour vive en París y hubiera querido pasar el verano en Túnez. Pero se hace mil y una preguntas. “Mis pases fueron cancelados y dudo en ir a visitar a mi abuela: no quisiera contagiarla”. A regañadientes, la natural tunecina se resigna para un verano en París, lejos de la familia. “Me gusta ir a Túnez y pasar un mes de vacaciones, incluso dos cuando puedo, así estoy con mis abuelos, en Bizerte o en Djerba”, explica la mujer de 26 años, que trabaja en la prevención de la salud.

Este año, los países del Magreb tendrán menos visitantes para las vacaciones del verano. Un serio revés para la economía de estos países, sobre todo cuando se sabe “el peso de la contribución financiera de la diáspora en el Magreb”. Por ejemplo, Marruecos acogió en 2019 más de 2,9 millones de marroquíes residentes en el extranjero (MRE) que, “participan activamente en el dinamismo del sector inmobiliario, al invertir para sus vacaciones o jubilación”.

En Argelia, las estancias de los argelinos residentes en el extranjero (ARE) abarcan cada vez más, más actividades turísticas con un gasto medio de 500 a 2 000 euros para cada verano”, piensa Mouad Kezzar, consultor y formador en turismo.

En Túnez, cerca de 500 000 tunecinos residentes en el extranjero (TRE) “reportaron en 2019 unos 5,3 mil millones de dinares en divisas, o sea, más que el sector del turismo”, según el Banco central, indica la misma fuente.