Marruecos consolida su proceso democrático bajo el impulso modernista de SM el Rey

Destacando la importancia histórica de estas elecciones, que marcan un punto de inflexión en la actualidad política nacional, la diplomática volvió sobre el buen desarrollo de estas elecciones, supervisadas por 4.500 observadores internacionales y nacionales, para subrayar que " estas elecciones traen buenas noticias no solo para Marruecos. Son un motivo de esperanza para la paz y el desarrollo del mundo árabe-musulmán".

El 8 de septiembre es un día histórico y decisivo para el pueblo marroquí, que acudió a las urnas y ejerció sus derechos cívicos de manera ordenada, disciplinada y totalmente transparente, como han informado los observadores nacionales e internacionales, afirmó Aouad en las columnas del periódico penameño.

Un día histórico, añadió, porque el reto era grande: por primera vez se celebró al mismo tiempo un triple escrutinio (legislativo, municipal y regional). Un día decisivo porque, tras los resultados del escrutinio, estas elecciones darán lugar a una verdadera alternancia democrática.

La misma recordó que para cumplir con el calendario institucional y electoral establecido por la Constitución, las autoridades han desplegado numerosos esfuerzos para hacer aplicar las medidas sanitarias preventivas contra la COVID-19.

A pesar de esta difícil coyuntura, las consultas se desarrollaron, agregó la diplomática, en una atmósfera pacífica, con un alto nivel de compromiso ciudadano y un espíritu de sana competencia entre los candidatos de los diferentes partidos.

Aouad subrayó que la tasa de participación más alta (muy por encima del promedio nacional del 50,35%) se registró en las provincias del sur, confirmando una vez más el apego de la población saharaui a su marroquidad.

Con una tasa de participación del 66,94% en Laayún-Sakia y del 58,30% en Dajla-Ued Eddahab, las regiones de las provincias del sur del Reino superan ampliamente la tasa registrada a escala nacional durante este triple escrutinio.

Según la diplomática, las aspiraciones de la población a un cambio se han concretado también en una representación femenina más importante y significativa. Así, tres de las ciudades más grandes del país, Rabat (la capital administrativa), Casablanca (la capital económica) y Marrakech (la capital turística del país), serán administradas por mujeres alcaldesas.

Añadió que los marroquíes han escrito así una nueva página de la historia de su vida política, con un cambio sustancial, efectuado en el respeto de las normas democráticas, en una ruptura y una alternancia pacífica, que refuerzan la estabilidad y la cohesión del país.

"Por su vitalidad democrática, Marruecos se afianza como una verdadera “Monarquía constitucional, democrática, parlamentaria y social”, consolidando el importante proceso democrático emprendido hace varias décadas bajo el liderazgo y visión modernista de su majestad", escribió.

"La democracia marroquí goza de buena salud. ¿Qué mejor manera de celebrarlo en 2021, con el aniversario de los 20 años de nuestra Constitución? ¿Y qué mejor manera de hacerlo con el resto del mundo, conmemorando el Día Internacional de la Democracia que se celebra cada 15 de septiembre?", concluyó la embajadora.